Su nombre significa “Piedad de Dios”. Su principal función consiste en ayudarnos a sentir, observar, procesar y expresar los sentimientos. Nos enseña que detrás de cada sentimiento hay implícita una necesidad y que vivir los sentimientos de forma positiva, siempre nos lleva a un crecimiento como personas. Nos asiste en hacer revisiones de vida profundas, que nos permitan tomar decisiones acertadas. Apoya en la interpretación de los sueños. Su energía es de color violeta, y cuando está presente se siente como la presencia de un viejo amigo.

 

captura-de-pantalla-2016-10-24-a-las-14-04-08