Hemos hablado ya de que el amor es el sentimiento más hermoso y más sublime que hay. Es más, hemos hablado ya de que ustedes mismos, sí, todos ustedes son amor, al igual que nosotros; como un diamante en bruto son amor cubiertos de una piedra que está conformada por ideas, costumbres, hábitos, creencias y sentimientos equivocados.

Entonces, ¿como aplica todo esto con el amor? Tomemos el ejemplo del diamante: cada vez que tú te permites sentir amor, y hablo del amor no sólo en cuestión de relación de pareja sino que estoy hablando de un amor genuino, amor por tu pareja, tus hijos, por tu familia, por tu mascota, tu trabajo, tus amigos, en fin amor por la vida, cada vez que te permites experimentar el amor dejas que ese diamante interno que tiene luz propia brille y al hacerlo debilite y “derrita” un poco de la piedra que tiene alrededor.

De la misma manera, cada vez que te permites sentir miedo o cualquier sentimiento, pensamiento o hábito que provenga de ese miedo, endureces la piedra.

Entonces, si hablamos de que este diamante interno, tu parte de amor puro vibrando en tu interior, es tu contacto directo con tu propia Divinidad siginifica que es la parte de Dios que habita dentro de ti (y así es).

La única forma de entrar en contacto con tu propia Divinidad es a través del amor, de dar amor. Entonces, CADA VEZ QUE AMAS, CADA VEZ QUE PERMITES QUE EL SENTIMIENTO DE AMOR AFLORE DENTRO DE TI, TE ACERCAS MÁS A DIOS.

Con esto te quiero decir que todos los caminos para llegar a Dios están bien, siempre y cuando sean caminados desde el amor y no desde el miedo. EL ÚNICO CAMINO VÁLIDO PARA LLEGAR A DIOS ES EL AMOR.

SONRÍE Y AMA. Te estamos acompañando:

Arcángel Sandalfón.

ARCÁNGEL SANDALFÓN