Queridos hermanos:

Nosotros los ángeles sabemos que están viviendo tiempos difíciles, en los que les resulta muy complicado encontrar momentos de verdadera paz y en los que el miedo ha ido ganando terreno en la vida de cada uno de ustedes.

Se preguntan una y otra vez: ¿Cómo generar un ambiente de paz?, ¿Cuándo podremos vivir en paz?, ¿Cómo podríamos heredar a nuestros hijos un país en paz?

Pues bien hermanos, sepan que la PAZ, la verdadera paz, no es algo que les será otorgado. No es algo que va a generar la sociedad, ni el gobierno, ni se creará al generar una mayor seguridad. La paz verdadera se genera, se gesta en el corazón de cada uno de ustedes.

La paz no va a venir de afuera hacia adentro, no podemos esperar tener un entorno pacífico para vivir en paz. Es una acción que debe ser generada adentro y extendida hacia afuera.

¿Cómo es esto? Lo primero que tienes que hacer para vivir en la paz es trabajar la aceptación de ti mismo: conocerte, aceptarte como eres, saber que estás haciendo tu mejor esfuerzo. Deja de criticarte, de juzgarte, de tratar de aparentar lo que no eres. Hacer las paces contigo mismo, aceptar aún aquellos aspectos de tu personalidad que te desagradan y de una vez y por todas empezar a amigar contigo mismo, quererte, respetarte y amarte a ti mismo.

Aunado a esta aceptación personal, viene la aceptación del entorno. Aceptar las circunstancias y las personas que te rodean tal cual como son, sin juicios, sin críticas; entendiendo que cada quien tiene una perspectiva de la vida diferente y que está bien, es la diversidad la que enriquece la vida. Dejar de tratar de controlar a los demás, intentando que piensen como tú lo haces, actúen como tú lo haces y respetar la individualidad de cada uno. Sobre tus circunstancias, cambiar aquello que si esté en tus manos cambiar, aceptar aquello que resulte inevitable y soltar aquello que no te corresponde.

En la medida que tú vivas en paz y lo modeles para los tuyos, enseñarás y darás permiso a los que te rodean a adoptar esta forma de vida.

Imagina que todos los seres de tu comunidad conforman un campo fértil y que están sembrando las semillas que conformarán un bello jardín, en la medida que generen paz en sus corazones, compartan esta paz y la expandan, irán construyendo un ser, una familia, una comunidad, una ciudad, un país de paz.

Con amor, paz y aceptación.

Arcángel Miguel

Extracto del libro ESCUCHA A TUS ÁNGELES EN EL CORAZÓN de venta aquí.