Queridos hermanos:

 Como ustedes ya saben estamos ante un evento sin precedente en la historia de la humanidad;  todos los tiempos, toda la evolución, toda la historia ha sido una preparación para la transformación que como humanidad están viviendo en estos momentos.    

A muchos de ustedes, estas palabras les pueden parecer huecas o etéreas;  para muchos que no lo están viviendo aún, pueden parecerles exageradas.  Sin embargo, los invitamos a guardar estas palabras en su corazón, porque en el futuro les dará claridad a sus acciones. 

 ¿De qué específicamente estamos hablando?    Han escuchado un sin fin de veces la expresión “Todos somos uno”;  pues bien, imagina el proceso de transformación personal que has vivido en los últimos años,  visualiza todo lo que has caminado para llegar al lugar en el que te encuentras hoy:  lo que has aprendido,  lo que has tenido que sanar en ti,  lo que has tenido que soltar, lo doloroso que fue al principio, pero lo reconfortante que es hoy ver lo que has crecido, lo que has experimentado, la forma en que muy despacio has ido abriendo tu corazón y finalmente la forma en que te vas iluminando y expandiendo.     Al vivir este proceso de despertar, ha habido en ti muchos cambios de índole energético, emocional y hasta se han manifestado en lo físico;  algunos de estos cambios son muy evidentes y otros son sutiles; pero todos han sido para tu más alto bien.     Para algunos de ustedes, el despertar ha sido como un renacer a la vida.

Pues bien, suma los procesos de todos los que en los últimos tiempos han estado en este despertar igual que tu.    Ahora observa que todos son uno…  es decir  observa que como planeta, como humanidad también han vivido el proceso..  aprender, sanar, soltar, crecer, abrir el corazón, etc.      

 Te das cuenta,  cuando lo viven como masa, cuando son muchos los que han estado viviendo ese proceso, tienen la posibilidad de hacer que el planeta entero se ilumine y se expanda en su energía y que empiece a experimentar cambios positivos al igual que los humanos.  También como humanidad hoy están hoy  transformándose,  están sanando y soltando lo que ya no les corresponde (esto a veces les da miedo o les resulta doloroso).  

Ahora,  como siempre,  estos procesos se pueden vivir desde dos perspectivas:   desde el miedo, aferrándote a las estructuras pasadas y con temor a los cambios;  o desde el amor, la alegría y la confianza de que entre todos están creando una mejor humanidad. 

 No dudes que en estos tiempos de cambio y de transformación,  en este proceso de parto para el nacimiento de una nueva humanidad los estamos acompañando, cuidando y guiando a cada momento. 

 Los amamos profundamente.

 Arcángel Raziel.

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